La comparativa entre el mundo de Joan Fuster y la actualidad
El 28 de noviembre se celebró en la facultad de filología, traducción y comunicación de la Universidad de Valencia, una conferencia-coloquio llamada “Joan Fuster y el periodismo”, protagonizada por Empar Marco y Josep Lluís Gómez Mompart, dos profesionales de la comunicación.
En esta charla se repasó la vida y los logros del escritor, y se resaltaron sus pensamientos. La dificultad económica que sufría Fuster, por lo poco que le pagaban con sus escritos. Más tarde comenzó a colaborar con periódicos como el País Valenciano, donde recibió ofensivas por sus publicaciones, o La Vanguardia, que fue su colaboración más larga, y la que más estabilidad económica le brindó.
Durante la conferencia se reiteró su dificultad de publicar y de hacerse un nombre en el mundo de la escritura, Fuster publico más de 400 artículos en más de dos docenas de diarios y revistas, tanto en Valencia, Barcelona y Madrid, y lo mal pagado que estaba.
Hoy en día, la realidad de los periodistas, no se va tanto de la época de Joan Fuster. Como el catedrático Josep Lluís Gómez Mompart dijo, el mundo de la comunicación no ha empeorado desde entonces, pero tampoco ha mejorado mucho. Los profesionales de la comunicación, cada vez son más los que deben luchar por buscarse un hueco en el mundo profesional y poder vivir de sus publicaciones. Los periódicos y medios pagan muy mal por una pieza, pero tampoco les interesa contratar a nuevos profesionales.
Además Fuster siempre presumió de que él era un escritor con flexibilidad lingüística, tenía un bilingüismo involuntario, es decir, él se acoplaba a la comunidad en donde estaba escribiendo. Eso es algo muy relevante, ya que hoy en día, hay mucha gente en la Comunidad Valenciana que no escribe sus escritos en valenciano por miedo a que no los publiquen o que nadie los lea. Joan Fuster opinaba lo contrario, él dijo que el hecho de ser valenciano había condicionado su carera tanto para bien como para mal, él era un valenciano que escribía en catalán, y no se arrepentía de ello, así lo resaltaron durante la conferencia.
No queremos que el valenciano desaparezca de nuestros escritos y para ello no solo hay que crearlo, sino también consumirlo. Y para ello, como dijeron en el coloquio, se necesita apoyar a aquellos que escriben en valenciano, debemos apoyar la lengua y a sus creadores.
