Según Eva Belmonte, otro periodismo es posible.
VALENCIA. 04/10/22. Eva Belmonte es una periodista de investigación que diseña y desarrolla muchos movimientos en Civio. ¿Qué es Civio? Es una organización que tiene como objetivo lograr la transparencia y la eficiencia de las instituciones públicas y dar a las personas las herramientas para lograr esta transparencia. Se trata de informaciones y encuestas basadas en la lectura diaria del Boletín Oficial del Estado. Eva Belmonte trabajó en El Mundo hace 8 años pero no le gustó y decidió seguir haciendo periodismo a su manera.
Según Eva, es hora de encontrar nuevas formas de hacer periodismo sin olvidar el periodismo clásico. De hecho, los periodistas tienen ciertas responsabilidades. Es importante que todo lo que produzcan esté bien hecho. Tres factores importantes son que deben tener cierta especialización, transparencia y colaboración.
Según ella, cada vez hay menos periodistas especializados, no conocen su tema en profundidad. Y el problema es que en las redacciones no siempre hay recursos y tiempo. Pero es importante conocer y entender bien un tema para escribir una historia de forma transparente. Tener una especialización puede ayudar al público a entender las cosas. En algunas noticias políticas, se dan demasiadas cifras y no podemos limitarnos a escribir lo que otros dicen, tenemos que averiguar e ir a la fuente principal para dar una información que sea real y aprobada.
También dijo que el trabajo del periodista es acercarse lo más posible a la verdad. Hay que tener cuidado con las filtraciones interesadas y dar un paso atrás cuando alguien te dice algo y preguntarte por qué te lo dice. Hay que desconfiar de todo lo que se dice porque las cosas no siempre son como se anuncian. También hay que tener cuidado con la oposición y las campañas. Es importante vigilar todo lo que se hace, sobre ciertas influencias. Hay que tranquilizar al lector.
Eva también habló del servicio público, porque para ella también es periodismo. Cada año, el gobierno miente sobre los presupuestos. El principal problema del lenguaje administrativo es que está mal escrito, es un lenguaje complicado. Hacen las sentencias más complicadas pero es importante entenderlo porque nos afecta (ayudas, corrupción, derechos, etc.). Hay una aplicación de ayuda para explicar mejor la normativa y en el libro "Diccionario Ilustrado" también explican la normativa.
En cuanto a la colaboración, nos aconseja no trabajar sólo con periodistas, porque muchos pequeños nos hacen crecer (periodistas, informáticos, diseñadores, becarios, etc.).
Cuidado con los datos solos que no dicen nada, necesitamos una historia detrás de los datos que recogemos.
Y, por último, nos recuerda que la transparencia es un derecho y que, por ley, todos somos iguales.
