La ola feminista recorre Valencia para el 25N
VALENCIA - El 25 de noviembre, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia hacia las Mujeres, varias manifestaciones tuvieron lugar en el mundo. En Valencia hubo miles de personas, yo incluide.
Antes de salir a la calle, el colectivo Resistència Feminista, cuyos carteles se podían ver por la Universidad de Valencia, organiza un taller de fabricación de pancartas a las seis de la tarde, cerca de la estación de metro Alameda. Las miembros traen cartulina roja y morada así que unos marcadores. Poco a poco, más gente llega y todes nos ponemos a la obra. Hablo con una de las organizadoras; me explica que Resistència Feminista es un colectivo transinclusivo y abolicionista con enfoque en la lucha de clase. El combate contra el patriarcado y el capitalismo es el mismo. Me invita a coger cartulina y un marcador para escribir un eslogan y me da ideas de lemas. Busco más inspiración en internet y encuentro una frase que me llama la atención: “Nos queremos libres e iguales en la diversidad”. La escogo porque para mi resume muy bien lo que es el feminismo ante todo: el derecho de existir libremente sin ser perjudicada por su identidad de género. Por eso añado el símbolo trans junto a la frase, ya que las personas trans también deben ser incluidas en la lucha feminista, no apartadas.
Unos diez minutos después, mi pancarta está lista. Echo un vistazo a lo que hacen los demás: eslóganes diversos, algunos percutantes, cada uno con un mensaje distinto.
Cerca de las siete, reunimos todo y salemos hacia Puerta del Mar, donde empieza la manifestación. La multitud es compacta. Se puede ver gallardetes y banderas feministas y queer. Nos quedamos juntes esperando el inicio. Alrededor de las siete y media, hay movimiento: la marcha comienza. Progresamos de manera tranquila por la calle Colón mientras gritamos eslóganes como “Patriarcado y capital, alianza criminal” o “Ni sumisas ni fascistas, mujeres combativas”. Somos miles vociferando nuestra frustración contra el sistema machista que oprima y mata a las mujeres. Los tambores hacen eco de nuestro hartazgo. Desde la acera, varias personas de compras por el Black Friday nos miran.
Seguimos por Xàtiva y acabamos en la Plaza del Ayuntamiento. Los organizadores de la marcha piden el silencio antes de una performance audiovisual con extractos audios de frases machistas ya pronunciadas por varias personas. Después se leen los nombres de las mujeres y niñes asesinades del 1 de noviembre 2021 al 31 de octubre de 2022, 69 en total. Tras cada nombre hay un golpe de tambor y una ofrenda floral. El ambiente es de contemplación. Después de eso, dos mujeres supervivientes de la violencia machista leen un manifiesto sobre las violencias sufridas por las mujeres y reivindican algunos derechos: una educación afectivo-sexual para todos los ciclos, políticas de empleo para mujeres, y que se apliquen los protocolos contra el acoso sexual en la esfera del trabajo, entre otros. La gente aplaude tras cada punto impactante. Para cerrar el evento, unas canciones en valenciano sobre violencias machistas son interpretadas por un coro de mujeres con guitarra. La música se difunde por la plaza, trayendo con ella un poco de esperanza en medio de todo.
