Marsella, la cuna del trap francés
VALENCIA.-Marsella es la cuna musical de muchos artistas que entienden la música de esta manera. De aquí nacen muchos de los temas de un estilo musical que lleva años en expansión y que, aún a día de hoy, sirve como medio de expresión para muchos artistas, en su mayoría jóvenes.
Aunque también tiene su origen en los suburbios de las grandes ciudades del sur de Francia como Lyon, Toulouse y Niza, el trap francés ha prosperado sobre todo en Marsella de la mano de artistas como Soolking o Sofiane. Por las calles de estas ciudades retumban las melodías de canciones como Tichy; canciones que denuncian la situación socio-económica de los grupos minoritarios que viven en el país.
En este podcast nos acercamos a los orígenes de los artistas más destacados dentro del panorama del trap francés y al sentido de ser de sus canciones más exitosas.
Antes de nada es de obligado conocimiento y mención el programa radiofónico dedicado a este estilo y movimiento musical en Francia: Planète Rap. Desde este espacio han sido muchos los cantantes que se han dado a conocer, además de servir como lanzadera de varios de los temas que han procurado la fama a raperos que hoy encabezan listas de éxitos, algunos como:
Soolking, un joven de origen argelino, siempre se encuentra entre las listas de éxitos del país. Su primer gran éxito fue Milano, que le catapultó a la fama entre los jóvenes franceses y le sirvió de pistoletazo de salida para su carrera artística.
Sofiane es otro de los grandes cantantes de este género; francés de origen, pero de ascendencia argelina cuenta con más de quince años de carrera y dos álbumes en el mercado.
El cantante conoció el éxito con canciones como Lundi, Tout l´monde sén fout o Mon p’tit loup.
A pesar de que la mayoría de los artistas en el trap francés hacen carrera en solitario también se dan en muchas ocasiones colaboraciones musicales, ya que son personas con orígenes y vivencias similares.
Bande organisée (interpretada por los raperos de origen marsellés Sch, Kofs, Jul, Naps, Soso maness, Elams, Solda y Houari) es una muestra de estas colaboraciones con las que los artistas pretenden dar voz a las experiencias y sentimientos compartidos por una comunidad.
La canción consiguió en tan solo doce horas un millón de reproducciones en YouTube y llegó a los siete millones en tan solo cuatro días, además de conseguir llegar al top cien de Spotify.
El gran éxito que cosechan estos raperos no es para menos, ya que, como ya hablaremos, artistas como Soolking han alcanzado cifras tan altas como la de 500 millones de visualizaciones en YouTube con canciones icónicas como Zemër, que en albanés significa corazón. Esta colaboración con la cantante de origen albanés Dhurata Dora fusiona diferentes idiomas y es lo que ha hecho que la canción se conforme como un éxito radical en Francia.
Otra de las canciones de las que hablaremos hoy es Guerilla; una reivindicación por parte de las personas racializadas, que sufren en sus pieles el estigma de no ser blanco: “nosotros siempre seremos los culpables, culpables de ser africanos” o “canto al amor en medio de esta guerrilla, porque te amaré para siempre mi Argelia” son algunas de las letras compuestas en este tema.
Veremos que las letras del trap francés combinan sentimientos como el amor y la esperanza con reivindicaciones y denuncias sociales. A través de los temas compuestos por estos artistas se pretende contar al mundo entero sus orígenes, revindicar sus derechos y lanzar un mensaje de libertad. Este ansia de liberación de muchas familias que luchan por un futuro mejor lo encontramos reflejado en temas como Liberté, cuya transcripción dice así: “disculpe la existencia, disculpe mis sentimientos y si digo que soy feliz contigo estoy mintiendo, dame mi libertad te lo pido amablemente”.
Otro tema que también trata de la esperanza en la libertad y total igualdad de las personas es Espérance, de Soolking. En esta canción el artista cuenta su propia historia, haciendo mención especial a su trayectoria: “Yo sigo igual desde Dalida, no es el dinero es dios quien me guio yo como el mío puedo morir por mis ideas, nos sentimos más fuertes juntos, no vemos pasar el tiempo, un día te irás terminarás aburriéndote, yo canté de paz, de tristeza y de alegría, miseria también porque no soy hijo de burgués”.
Repasando brevemente la trayectoria de estos artistas y los sentimientos que les movieron un día a componer canciones como las que traemos hoy aquí, es fácil comprender que el trap francés es una incesante búsqueda de la justicia y la igualdad, conformándose al mismo tiempo como un canto de amor a la vida y demostrando que el éxito siempre llega cuando la música que cantas sale del corazón.
