Los comercios se preparan para una complicada campaña navideña
18/11/2020- VALENCIA. La pandemia del COVID-19 ha llevado a la sociedad española a una gran crisis de la que va a ser difícil salir. El sector terciario se ha visto especialmente afectado, puesto que la gente ha limitado sus gastos a los productos más esenciales. Tras sufrir recortes salariales, pérdidas económicas e incluso despidos, los comercios depositan todas sus esperanzas en la inminente campaña navideña.
Fachada de El Corte Inglés. Marta Álvarez.
Para conocer como están viviendo esta situación las tiendas de ropa y juguetes, principales beneficiarias de las compras navideñas, se han recogido diferentes testimonios de trabajadores y encargados de distintas empresas. En general, se aprecia un cambio en los hábitos de consumo de los clientes, pasando a ser la compra online su principal opción. Por esta razón, las compañías centran su atención en esta forma de negocio, que va creciendo poco a poco: “y es que es verdad, el cliente se ha vuelto más retraído, más cuidadoso con lo que gasta, y por supuesto tiene más miedo a visitarnos. Hemos apreciado un aumento de las compras a través de Internet”, comenta Isamar, dependienta de El Corte Inglés.
"Hemos apreciado un aumento de las compras a través de Internet"
Cliente realiza una compra online. Marta Álvarez
Aunque los pedidos online pueden compensar las pérdidas de este último año, no es la estrategia más beneficiosa para los trabajadores de los comercios. Dependientes y dependientas de tiendas como Mango, reclaman que muchos consumidores realizan sus compras a través de la web pero luego recogen sus pedidos en el local. De esta forma el cliente sigue expuesto a un posible contagio, incrementa el volumen de trabajo de los empleados e imposibilita que reciban las comisiones derivadas de las compras en tienda.
La Navidad supone el 50% de la facturación de las tiendas de juguetes, tal y como asegura el encargado de Juguetilandia. Este sector espera que la ilusión de los niños por recibir los regalos en Navidad salve las ventas de lo que queda de año. Pero la incertidumbre sigue estando presente, pues se desconocen las futuras restricciones y se teme un posible confinamiento domiciliario: “si hubiera un confinamiento total, hemos actualizado nuestra pagina web para que funcione mejor que antes de la pandemia”, cuenta la encargada de Poly Juguetes.
Decoración Navideña en un escaparate. Silvia Felgueras.
Otro de los problemas de las tiendas de productos infantiles es la complejidad en el suministro y la distribución de productos, ya que muchos de ellos provienen del extranjero. La responsable del local Eureka Kids prevé que parte de la mercancía no llegue a tiempo a los establecimientos para poder venderse, hecho que también repercutirá en el número de ventas y, en consecuencia, a los beneficios.
En general, la campaña navideña de 2020 viene cargada de nuevas estrategia que buscan adelantarse a posibles medidas más restrictivas, como la extensión de los plazos en cambios y devoluciones o la anticipación de las rebajas en algunos productos, logrando así que muchos clientes adelanten las compras de las futuras fiestas. Sin embargo, los jefes y encargados de grandes almacenes se han mostrado reacios a desvelar los planes previstos ante un empeoramiento del escenario, aunque sí confirman que se están llevando a cabo algunas reuniones entre los altos cargos del sector con el objetivo de estudiar la situación.
La incertidumbre se posiciona como la protagonista de esta temporada, obligando a todas las empresas a improvisar en función de como evolucione la realidad y a las nuevas medidas que estipule el Gobierno. El confinamiento domiciliario supondría un duro golpe para todas ellas, pero se espera un repunte en los índices de consumo derivados de un anhelo por querer recuperar, al menos durante estas fechas tan especiales, parte de la normalidad.
