El agresivo impacto medioambiental de la ampliación del puerto de Valencia
VALENCIA. 4 nov. La plataforma ciudad-puerto dio comienzo a su reivindicación el 30 de octubre, movilizándose por todo el municipio con una pancarta con el lema "Menos puerto, más València", donde denuncian la ampliación del puerto de Valencia y demandan que se empiecen a hacer más proyectos sostenibles en la ciudad.
La plataforma ciudad-puerto es una serie de colectivos ecologistas como Ecologistas en Acción de Valencia, la Asociación de Vecinos de Nazaret, ‘El Litoral per al Poble’, ‘Per l´Horta’, entre otros; pero cuya carga principal recae en estos, ya que han empezado una lucha contra la ampliación del puerto de Valencia.
La Autoridad Portuaria, junto con el beneplácito del gobierno valenciano, tiene la intención de duplicar por dos la capacidad del puerto de Valencia, acto que provocó la movilización de estas asociaciones. Josep Gavaldà, miembro de Per l´Horta, hizo unas declaraciones a este diario, donde afirma: “El plan que tienen es duplicar la parte norte con 20 millones de metros cúbicos de tierra para hacer una explanada de 150 campos de fútbol”, destaca que esa tierra se sacará de una sierra de alrededor y de las playas como Cullera que haría “que se hundiese y acaben desapareciendo”.
Además, la lucha que propone desde su organización, integrada en la plataforma ciudad-puerto, consiste en hacer ver a la ciudadanía el coste de esta construcción. “Serían 400 millones de euros solo con la construcción de la ampliación, pero si añadimos el resto de infraestructuras necesarias aumentaría hasta los 3 mil millones de euros, más que los presupuestos generales de la Generalitat Valenciana”, afirma Josep Gavaldà.
Por otra parte, aclara que el principal problema no sería los gastos en las infraestructuras, “lo primordial sería frenar el impacto medio ambiental que tiene esta ampliación en la zona”. Este terreno es reconocido por tener unos niveles de CO2 muy elevados y que ya supera el límite recomendado por la OMS, es por eso que esta ampliación supondría duplicar los niveles contaminantes de la zona.
Así mismo, este impacto medioambiental causaría problemas en la vida de las personas, por la calidad del aire, por la fragmentación de hábitats, la contaminación sonora y demás, haciendo así que todas las personas sufran las consecuencias de esta ampliación.
Es por eso que pide coherencia al gobierno valenciano y a la alcaldía, pues en sus declaraciones Josep Gavaldà destaca: “Es hipócrita tener en la agenda política la lucha contra el cambio climático, pero después llevar a cabo un plan de tal destrucción medioambiental sin calcular si tendrá ingresos, ni las consecuencias climáticas”.
Es así que la plataforma ciudad-puerto reclama un cambio de parecer en cuanto al proyecto, pues ellos creen que no es ni el momento histórico ni económico, y se debe virar hacia otros propósitos que realmente sí que sean beneficiosos para el conjunto de la ciudadanía de Valencia, que sería un plan de acción contra el cambio climático, para hacer así que la vida de las personas mejore y los niveles de contaminación bajen.
