Usted está aquí: Inicio / Grupo A / La relación entre los TCA y las redes sociales se estrecha cada vez más

La relación entre los TCA y las redes sociales se estrecha cada vez más

Las nuevas plataformas digitales han multiplicado los trastornos de salud mental en miles de adolescentes
La relación entre los TCA y las redes sociales se estrecha cada vez más
Imagen: La pandemia ha provocado el aumento de los TCA en la universidad. MARÍA VALERO

Internet y los Trastornos de la Conducta Alimenticia (TCA) iniciaron su relación hace más de tres décadas. Las primeras páginas web que colaboraron para alimentar los desajustes alimenticos y mentales fueron las pro-Ana y pro-Mía, donde Ana hace referencia a la anorexia y Mía a la bulimia. En ellas se exponían trucos milagrosos para perder peso de manera rápida y se generaron las señas de identidad propias que sembraron la semilla de lo que es hoy en día una comunidad mundial de TCA. Así lo demuestra el informe realizado por la Asociación contra la Anorexia y la Bulimia (ACAB) que corrobora que las webs con contenidos que hacen apología de los TCA han crecido un 470%. 

La gente te dice: ¡Come! o ¡Lo que tienes que hacer es dejar de vomitar! Ojalá fuera así de fácil"

Victoria, una joven de 21 años, confiesa que en secundaria no fue a ninguna excursión por miedo al rechazo. “Solo quería ser una chica como las de Instagram y la obsesión por cumplir los cánones de belleza me llevo a sufrir ataques de ansiedad. Hace cinco años reconocí que tenía un problema y decidí comer sano y hacer ejercicio.Antes de esa decisión, me obsesionaba tanto con la comida que dejaba de comer durante días o vomitaba cuando me sentía culpable.”

La relación entre Internet y los TCA se ha ido volviendo más tóxica y dañina con el paso del tiempo y la llegada de redes sociales como Instagram o TikTok. Pues los trastornos alimenticios tienen un carácter muy social. La vida que exponen diversos influencers es aparentemente idílica y su cuerpo se ajusta a la perfección con los cánones de belleza establecidos por la sociedad actual. 

El círculo vicioso de las redes sociales 

El uso de los medios sociales empieza a ser considerado un problema de salud pública por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Un estudio realizado por el organismo demuestra que usar siete de las once redes sociales más populares se asoció con un riesgo 3 veces mayor de sufrir depresión y ansiedad, en comparación con aquellas personas que sólo usan dos o ninguna red social.

Los influencers utilizan su relevancia en redes sociales para regular y priorizar el cuidado de la salud mental. Laura Escanes pone el ejemplo de cuando en agosto tuvo que explicar a sus 1.8 millones de seguidores su ausencia en redes a lo largo de dos semanas. La influencer manifiesta que “desde hace más de seis años nunca había hecho eso… Supongo que todos en algún momento necesitamos parar. Mostrar que no siempre somos fuertes, nos hace fuertes” 

laura escanes.jpeg

"La terapia ha sido la clave para mejorar mi salud mental". Instagram @lauraescanes  

Adolescentes y mujeres son el perfil de las personas que más usan las redes sociales según el Instituto Nacional de Estadística (INE). Los datos dicen que el uso global de las redes sociales está creciendo con más de 2.000 millones de usuarios en el mundo. América del Norte y Europa son los continentes en los que más se emplean las redes socilaes con un índice de penetración del 70% y 66%, respectivamente.

Indicadores de salud mental antes y después de la pandemia. (Marzo 2019- Marzo 2022)

in.png 

Fuente: INE 

El caso de Instagram 

Si acercamos la lupa a los datos de Instagram, nos encontramos que el 51% de sus millones de usuarios accede a diario y un 35% más de una vez al día. Además, el 68% de sus usuarios son mujeres y para el 32% de la población adolescente es su red social más importante. Por tanto, Instagram es una red en la que confluyen dos aspectos demográficos que se consideran factores de riesgo para el desarrollo de un TCA: ser mujer y ser adolescente.

La pandemia, caldo de cultivo ideal para el TCA 

El confinamiento, el colapso sanitario y la conciencia de un presente y un futuro devastador han sido elúltimo incentivo para la proliferación de casos de TCA entre los más jóvenes. La pandemia por COVID sorprendió al mundo en marzo de 2020, cambio la rutina de millones de personas y sus efectos todavía están presentes a finales de 2022. 

Desde entonces, los medios de comunicación no paran de publicar datos y estudios donde, mediante evidencias científicas, se pone de manifiesto el aumento de diversos trastornos psicológicos, sobre todo, de ansiedad y depresión. Tanto es así que, la OMS acuñó a finales de 2020 un nuevo término, la “fatiga pandémica”, con el que hacía referencia al desgaste psicológico provocado por la crisis sanitaria

Los TCA aumentaban a la par que los casos de COVID y se produjo un aumento de un 20% en los ingresos, así como un empeoramiento de los 400.000 pacientes diagnosticados que ya sufrían esta enfermedad en nuestro país. El resultado es que el sistema en muchos casos no ha podido brindar a estos pacientes la atención que necesitan y la falta de profesionales en la seguridad es cada vez más evidente

PANDEMIA .jpeg

La pandemia ha aumentado los problemas de salud mental. DANIEL LOZANO

La urgencia sanitaria de la salud mental 

La idealización que suponen las redes sociales ha provocado que cada vez más personas tengan más problemas con la autoestima, los trastornos obsesivos o de la conducta alimenticia e incluso suicidios. No solo el COVID es una urgencia sanitaria sino también la salud mental, que debe cuidarse más a través de la solidaridad social y el apoyo mutuo, que se han perdido en estos tiempos de independencia y egoísmo.

 El rol de las redes sociales en la salud mental debería pasar de ser negativo a positivo. La psicología debe también abrir sus ámbitos de actuación en las redes sociales más allá de la faceta patológica. Sentirse mal con uno mismo e incluso acabar con su propia vida no son conductas que deban normalizarse.

 

Subtema: Sanidad
Territorio: Mundial