El posible cierre de la hostelería ahogará aún más a la restauración de València

04/11/2020 - VALÈNCIA. Las enormes pérdidas tras el puente de Todos los Santos suponen un punto de inflexión para los hosteleros de València, que ante la espera de que se implanten nuevas restricciones en el sector, prevén que continúen bajando los ingresos.

La vicepresidenta de la Comunidad Valenciana, Mónica Oltra, se ha mostrado partidaria de restringir la actividad social y por ello, del cierre de la hostelería, según declaraba a TVE respondiendo sobre qué medidas deberían adoptarse ante una nueva ola de Covid-19. La vicepresidenta ha manifestado la necesidad de imponer medidas más restrictivas con motivo del imparable crecimiento de contagios en los últimos meses, produciéndose la gran mayoría de ellos en locales de ocio.

Siguiendo el ejemplo de países europeos como Alemania y Francia, así como también de las comunidades autónomas de Murcia, Cataluña, Asturias, Navarra, Castilla y León o La Rioja, Oltra aboga por adoptar medidas más severas, sin embargo, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, no contempla de momento el cierre de los establecimientos hosteleros debido a la importancia de este sector en la economía valenciana. A su vez, la Generalitat ha decidido emitir diversos comunicados por redes sociales para frenar los bulos que se estaban compartiendo, ya que esta decisión aún no se ha tomado.

Ante la incertidumbre, y basándose en los datos obtenidos tras el puente de Todos los Santos, los hosteleros valencianos temen que la puesta en marcha de nuevas medidas más restrictivas influya negativamente en sus negocios. El cierre perimetral de Valencia y a nivel nacional ha afectado en gran medida a los típicos merenderos valencianos, al ser sus principales clientes provenientes de comunidades del interior de la península.

"El puente de Todos los Santos ha sido un fracaso totalmente, pues todo lo que sean cierres a nivel de comunidades van a afectar al sector turístico de playa. Nos ha afectado muchísimo" declaraba Ginés Navarro, propietario del restaurante "La Murciana" a uValencia.

Ante la situación y el desconcierto de las futuras restricciones en la comunidad, los hosteleros de la playa de Valencia depositan sus esperanzas y confían en que las medidas que se están adoptando sirvan para salvar la temporada de Navidad. "La situación va a ir avanzando poco a poco, y conforme se están viendo ahora mismo los índices y los marcadores, vemos la situación pésimamente" explicaba Navarro en nombre de la Asociación de Empresarios de Hostelería Playa Las Arenas, a lo que añadió: " Esperemos que, a partir de Navidades, empecemos a repuntar y las fiestas Navideñas hagan que reflote la economía turística hostelera". 

Comida en el restaurante "La Murciana" @restaurantelamurciana

La situación hostelera también afecta a los hoteles de Gran Lujo

También está expectante ante las nuevas restricciones hosteleras el Hotel Balneario Las Arenas, que sufre la pandemia y las restricciones con mayor dificultad que los merenderos a nivel de ingresos, pero que sin embargo han podido superar estos efectos mejor que la gran mayoría de hoteles de València, debido a su ubicación y a su estructura como hotel.

El hotel de cinco estrellas Gran Lujo, situado a escasos metros del paseo marítimo de la playa de la Malvarrosa, ha realizado una enorme inversión comprando numerosas máquinas de ozono y acondicionando sus salas para ofrecer una estancia que ya ha sido certificada por la Generalitat de sistema de protocolo anti Covid-19 y con el sello de "Safe Tourism Certified" creado por el Instituto de Calidad Turística Española (ICTE).

"El puente de Todos los Santos este año no ha existido. Estas fechas de normal para nosotros suelen ser muy buenas, y este año hemos tenido un 17% de ocupación", según ha informado Vicente Meliá, segundo jefe de sala del hotel Las Arenas a uValencia. "La incertidumbre de las nuevas restricciones y el cierre perimetral nos va a afectar bastante la semana que viene. De 253 habitaciones que tiene el hotel, la próxima semana solo tendremos 2 ocupadas" explicó Meliá.

El hotel tampoco dispone de próximas reservas de eventos, lo que suele generar un importante ingreso para la cadena. "Nosotros contamos con instalaciones, como salones acondicionados con máquinas de ozono en las que caben de 150 a 400 personas, que podrían ser rentables incluso al 50% de aforo. El problema es que no hay gente que quiera hacer este tipo de eventos" destacó Meliá.

"Tenemos las instalaciones acondicionadas para eventos, pero la gente no viene, porque al fin y al cabo, el miedo sigue ahí". 

Así mismo, teniendo en cuenta que el perfil de clientes del hotel es mayoritariamente de origen extranjero, el cierre de comunidades y provincias ha afectado negativamente al eliminar al huésped nacional, proveniente de las comunidades del interior, que salvaría de alguna manera la ocupación del hotel. "Pese a la situación, hablando como hostelero, confiamos en que con la temporada de Navidad mejore esta situación", apuntó Vicente Meliá.